Cincuenta años de lucha contra los accidentes

Cuando, hace 50 años, se abrieron las dependencias de la Jefatura Central de Tráfico, raro era el español que no tenía un 600 o un 2CV. La seguridad en los coches y en las carreteras era mínima y, pese a ello, ya había más de 6.000 vehículos en la provincia, aunque esta cifra es en la actualidad 25 veces superior. Se necesitaba un organismo que pusiera orden a este boom automovilístico. Así surge lo que fue el germen de la DGT, tal y como hoy la conocemos. Pero, para llegar hasta donde se ha llegado, con las cifras de siniestralidad más bajas de la historia, la DGT ha tenido que hacer un esfuerzo encaminado en una doble acción: concienciadora de los hábitos de conducción y sancionadora. Atrás quedaron los tiempos en que el coger el coche con una copa de más o ir a más velocidad de la permitida era algo habitual y socialmente aceptado.