El Centro Comercial Ferial Plaza acoge una exposición de la histórica muñeca Mariquita Pérez
01/10/2010 - 09:45
Por: MAR GATO. MADRID
Mariquita Perez, la muñeca más famosa de los años 40 y 50, vuelve a estar de plena actualidad gracias a la exposición que el Centro Comercial Ferial Plaza ha organizado con el fin de devolver a la infancia a las que un día fueron niñas y rindieron culto en sus pensamientos a esta muñeca con personalidad y biografia propias. Para todas ellas, y para las que hoy descubren el significado trascendental de esta reliquia, está destinada esta exposición, compuesta por 160 muñecas antiguas y originales que datan entre 1940 y 1960 y que podrá ser visitada hasta el próximo 1 de noviembre en la primera planta del centro comercial guadalajareño.
Hasta el próximo 1 de noviembre el Centro Comercial Ferial Plaza nos invita a volver a la más tierna infancia con Mariquita Pérez, una extraordinaria exposición formada por 12 vitrinas que a modo de escaparate dan vida a 160 muñecas antiguas y originales que datan entre 1940 y 1960.
Esta exposición no es una simple muestra de muñecas antiguas, tiene algo de peculiar y este rasgo diferenciador consiste en que en ella se exhiben aquellas muñecas que se vendían en las jugueterías españolas entre 1939 y 1959, el objeto de culto que todas las niñas de aquella época quisieron tener pero que muy pocas consiguieron.
Estas muñecas fueron fieles testigos de una España recién salida de una Guerra y constituyeron un foco de esperanza de una vida mejor. Ellas reflejan los cambios de moda y la ideología predominante de aquella época.
Mariquita Pérez fue creada con la intención de que tuviera una personalidad y una biografía. De esta manera, representó la personalidad a la que aspiraban las niñas de la época y enriqueció su biografía con la historia de su país.
Un objeto deseado
La ilusión y la escasez son extrañas compañeras de viaje. De ahí que cuando se da tan especial conjunción el éxito de la empresa en sí está asegurado. Mariquita Pérez es un ejemplo palpable. Nació en los últimos estertores de 1939 y después se fue abriendo paso por el oscuro camino de la posguerra hasta llegar a los albores de los años 60 en los que España empezaba a dibujar una sonrisa tras el penoso letargo.
Mariquita fue un bálsamo más bien sentimental, pues sus dueños no tenían problemas económicos. Se convirtió en el estandarte de unas altas clases sociales y en el delirio de otras más bajas que la engrandecieron a través de sus sueños.
Hablar de la muñeca por excelencia en aquel periodo de tiempo, es decir, de la muñeca más famosa y de la más primorosa, es absolutamente imprescindible hablar de la muñeca Mariquita Pérez, ya que marcó un hito histórico en la sociedad. Las niñas querían ir vestidas con los mismos modelos que la muñeca; era la más cara y no estaba al alcance de la mayor parte de las familias. Fue un gran éxito comercial, debido al gran amor, entusiasmo y cariño que puso su creadora, Leonor de Góngora.
Tuvo centenares de accesorios, entre vestidos, zapatos, gafas, sombreros, abanicos..., hoy perfectamante visibles en muchas de las vitrinas que se suceden en el centro comercial, y con los que comparte espacio el que sería el nuevo miembro en la familia, su hermano Juanín.
Nace Gisela
Es en 1944 cuando se crea con posterioridad a Mariquita Pérez la muñeca Gisela, competencia directa de la primera. Otra de las muñecas más famosas de la época fue Cayetana, amadrinada por la Duquesa de Alba en su juventud. Es posteriormente cuando, a la vista del éxito de aquellas anteriores muñecas, aparecen en el mercado juguetero otras como Mari Cris, Malibu, Lily, Baby Chachy..... Glamurosas donde las haya compartirán espacio en el Ferial con muñecos de manufactura más humilde de la posguerra, tales como algunos Pepones de cartón piedra, creados en talleres domésticos.
La finalidad de esta exposición no es otra que la de reencontrarnos con aquellas antiguas y entrañables muñecas con las que casi todas las niñas españolas, hoy madres y abuelas, soñaron y desearon jugar; a la vez que hacer un interesantísimo paseo por la España desde los años del racionamiento puro y duro hasta los años 60.
Esta exposición no es una simple muestra de muñecas antiguas, tiene algo de peculiar y este rasgo diferenciador consiste en que en ella se exhiben aquellas muñecas que se vendían en las jugueterías españolas entre 1939 y 1959, el objeto de culto que todas las niñas de aquella época quisieron tener pero que muy pocas consiguieron.
Estas muñecas fueron fieles testigos de una España recién salida de una Guerra y constituyeron un foco de esperanza de una vida mejor. Ellas reflejan los cambios de moda y la ideología predominante de aquella época.
Mariquita Pérez fue creada con la intención de que tuviera una personalidad y una biografía. De esta manera, representó la personalidad a la que aspiraban las niñas de la época y enriqueció su biografía con la historia de su país.
Un objeto deseado
La ilusión y la escasez son extrañas compañeras de viaje. De ahí que cuando se da tan especial conjunción el éxito de la empresa en sí está asegurado. Mariquita Pérez es un ejemplo palpable. Nació en los últimos estertores de 1939 y después se fue abriendo paso por el oscuro camino de la posguerra hasta llegar a los albores de los años 60 en los que España empezaba a dibujar una sonrisa tras el penoso letargo.
Mariquita fue un bálsamo más bien sentimental, pues sus dueños no tenían problemas económicos. Se convirtió en el estandarte de unas altas clases sociales y en el delirio de otras más bajas que la engrandecieron a través de sus sueños.
Hablar de la muñeca por excelencia en aquel periodo de tiempo, es decir, de la muñeca más famosa y de la más primorosa, es absolutamente imprescindible hablar de la muñeca Mariquita Pérez, ya que marcó un hito histórico en la sociedad. Las niñas querían ir vestidas con los mismos modelos que la muñeca; era la más cara y no estaba al alcance de la mayor parte de las familias. Fue un gran éxito comercial, debido al gran amor, entusiasmo y cariño que puso su creadora, Leonor de Góngora.
Tuvo centenares de accesorios, entre vestidos, zapatos, gafas, sombreros, abanicos..., hoy perfectamante visibles en muchas de las vitrinas que se suceden en el centro comercial, y con los que comparte espacio el que sería el nuevo miembro en la familia, su hermano Juanín.
Nace Gisela
Es en 1944 cuando se crea con posterioridad a Mariquita Pérez la muñeca Gisela, competencia directa de la primera. Otra de las muñecas más famosas de la época fue Cayetana, amadrinada por la Duquesa de Alba en su juventud. Es posteriormente cuando, a la vista del éxito de aquellas anteriores muñecas, aparecen en el mercado juguetero otras como Mari Cris, Malibu, Lily, Baby Chachy..... Glamurosas donde las haya compartirán espacio en el Ferial con muñecos de manufactura más humilde de la posguerra, tales como algunos Pepones de cartón piedra, creados en talleres domésticos.
La finalidad de esta exposición no es otra que la de reencontrarnos con aquellas antiguas y entrañables muñecas con las que casi todas las niñas españolas, hoy madres y abuelas, soñaron y desearon jugar; a la vez que hacer un interesantísimo paseo por la España desde los años del racionamiento puro y duro hasta los años 60.