El consejero delegado de AIG estudia dimitir apenas tres meses después de asumir el cargo

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
Robert Benmosche, consejero delegado de la aseguradora estadounidense controlada en un 80% por el Gobierno, ha informado al consejo de la entidad que estudia abandonar el cargo asumido hace tres meses por su malestar con las restricciones impuestas por los supervisores, según informa el diario 'The Wall Street Journal', que cita fuentes conocedoras de la situación.
El ejecutivo habría comunicado a varios miembros del consejo su intención de abandonar el puesto, aunque accedió a reconsiderar su decisión a petición de la cúpula directiva de la aseguradora.

La decisión de abandonar AIG estaría motivada por el malestar de Benmosche con las recientes restricciones impuestas a AIG por los supervisores gubernamentales, especialmente por el 'zar salarial', Keneth Feinbergh, quien impuso a la aseguradora una estricta política de retribuciones después del multimillonario rescate de la entidad, que en septiembre de 2008 estuvo al borde la quiebra.

A este respecto, el periódico señala que la semana pasada Benmosche y otros consejeros de AIG se reunieron durante tres horas en Nueva York con Feinberg para discutir las dificultades de la entidad a la hora de aplicar dichas restricciones, que podrían provocar la marcha de varios empleados destacados de la aseguradora.

No obstante, el rotativo apunta que la posible marcha de Benmosche aún no está clara, puesto que el máximo ejecutivo de AIG se ha caracterizado en el periodo que lleva al frente de la aseguradora por sus declaraciones "provocadoras".

De hecho, recuerda que ya se rumoreó su posible dimisión el pasado mes de agosto, cuando se discutía la cuantía de su paquete retributivo, que asciende a 10,5 millones de dólares y es el más elevado entre los autorizados por el Tesoro de EEUU.

El grupo asegurador estadounidense American International Group (AIG) obtuvo un beneficio neto de 455 millones de dólares (306 millones de euros) en el tercer trimestre, en contraste con las pérdidas de 24.468 millones de dólares (16.471 millones de euros) del mismo periodo del año anterior.

La aseguradora estadounidense encadena así dos trimestres consecutivos en positivo gracias a la mejoría de los mercados y los cambios contables aplicados desde el segundo trimestre de 2009.