La salvación y la fe del Azuqueca quedan en manos del Madridejos

20/04/2014 - 13:31 R. Martínez

 
Realmente parecía que jamás llegaría el momento pero al final ha llegado; el Azuqueca está en puestos de descenso. A medida que los rojinegros iban descendiendo en la clasificación merced a una segunda vuelta horrible, se acercaba la fecha señalada, el partido de los partidos ante el Madridejos. Se trataba de una final entre los dos principales candidatos a ocupar la tercera plaza por la cola. El Zona 5 está descendido hace semanas y el Illescas lo tiene prácticamente imposible, por tanto, la lucha se centra ahora en eludir esa última posición en el patíbulo.
Ganar, empatar o perder tendría una trascendencia enorme en lo numérico pero también en lo anímico. Sabedores de la importancia capital de la cita, ambas escuadras comenzaron siendo un manojo de nervios.

Las oportunidades de peligro se sucedían en ambas áreas fruto de la tensión. Con las defensas como flanes, Goya desperdició un gol cantado desde el área pequeña y más tarde cruzó el esférico en demasía ante la salida de Sergio Sánchez –Javi Alonso, con un dedo roto, se pierde el resto de la temporada–. Eso por parte azulona, en cuanto a los rojinegros, Esaú tuvo en sus botas el 1-0 al igual que Pascu en un par de acciones peligrosas desde dentro del área de castigo.

Sin guardarse nada
Azuqueca y Madridejos atacaban a pecho descubierto y los goles eran cuestión de tiempo. Rascó premio primero el cuadro de Miguel López –en la grada tras la expulsión de la semana pasada– al cabecear Miguelón un fantástico servicio de Pascu en un libre indirecto. Sin embargo poco le duró la alegría a la parroquia local puesto que enseguida devolvió las tablas al luminoso el conjunto foráneo gracias a un gol de Richi en una clara indecisión de la zaga azudense. Con temor a encajar un segundo tanto y la mosca detrás de la oreja, ambos equipos encararon el túnel de vestuarios.

Tras la reanudación fue el Azuqueca quién salió con mayor brío con alguna acción elaborada por banda y tímidos acercamientos al portal defendido por Toni. El cancerbero le arrebató el balón a Esaú cuando estaba a escasas pulgadas de rematar de cabeza y Pablo Jiménez disparo flojo desde el balcón del área. Las sensaciones eran buenas. Pero antes de cumplir el primer cuarto de hora llegó el mazazo en forma de contra letal, precedida eso sí por una falta clara, finalizada con destreza por Santi . A continuación, el cuadro de Miguel López reaccionó, con convicción y agallas, echándose hacía arriba. David Moreno se ofrecía en la medular y Pascu entraba en juego a cuentagotas aunque con talento. Aún así faltaba ese último punch en zona de finalización. Precisamente eso le sobró al Madridejos. Una nueva contra fulminante y un pase fantástico de Santa para Ángel Luis desembocó en el 1-3.

Quedaban 25 minutos por delante pero el Azuqueca ya no se levantaría de la lona. Lo intentó pero sin ideas, sin guión, con Miguelón de delantero centro, a base de pelotazos y centros a la olla. Tito mandó un remate a las nubes, también Charly y un cabezazo de Miguelón se perdió por el lateral de la red. No había manera. Quién sí tuvo la suerte de cara fue Ángel Luis para marcar desde el centro del campo uno de los goles del año –al estilo Édgar– y poner así la rubrica a uno de los días más negros de la historia reciente del Azuqueca. Los rojinegros ya no dependen de sí mismos y se aferran a un clavo ardiendo para evitar el descenso en las tres finales que les quedan.