El Balonmano Guadalajara logra la victoria por la mínima

28/02/2015 - 10:59 Juanjo Ortega

César Montes emitió un largo suspiro de alivio, soltando parte de la tensión contenida. Habían pasado muchos minutos ya desde que su equipo, el Balonmano Guadalajara, se había impuesto por la mínima al Ademar de León, pero el cordobés era consciente de la costosa que fue la empresa. De hecho, aunque quizás en ese instante, hablando con su entorno, no se acordase, lo que Montes y sus jugadores habían logrado no lo había conseguido ninguna plantilla alcarreña. Y es que, tras seis derrotas y un empate, el cuadro leonés se fue de vacío de Guadalajara.
Y lo hizo tras un partido con mil alternativas y que se decidió por los pequeños detalles. Como por ejemplo, los escasos minutos que Barbero estuvo bajo el arco. El dato es elocuente: le tiraron sólo cuatro veces, tres de ellas desde los siete metros; pero detuvo dos y catapultó a los alcarreños en la segunda mitad.
Antes, mucho antes, cuando la chiquillería (y los no tan chicos) de la cantera aún se estaban situando en las gradas de un David Santamaría que presentó muy buen aspecto; fue Ignacio Peciña el que tiró de los suyos. El irundarra era el punto final de un Balonmano Guadalajara que arrancó mucho más enchufado que su adversario. De hecho, el pivote sumaba ya tres tantos en los primeros cinco minutos de partido.
Los alcarreños volaban en ataque y mordían en defensa, con Javi Parra de adelantado, enturbiando la circulación leonesa. Con todo, los de Dani Gordo no tiraban la toalla. Iban con el gancho puesto, pero iban.
Su técnico buscó un respiro y un cambio de tendencia solicitando un tiempo muerto (8-5, minuto 9), pero una exclusión de Leo de Almeida confirmó aún más el dominio local. Viendo que su defensa no le funcionaba, Ademar cambió el sistema y pasó al 5-1. Ello, unido al cansancio local, permitió amagar con la remontada, pero se trató de un espejismo y Dani Gordo tuvo que llamar de nuevo a capítulo a sus hombres coincidiendo con la máxima ventaja local (18-13, minuto 25).
Todo cambió tras el paso por los vestuarios. Tras sobrevivir al primer minuto en el que los leoneses jugaron con dos hombres menos por exclusiones al final del periodo anterior, la renta alcarreña (21-16), fue menguando. Llamazares, que había vuelto al marco visitante tras ser sustituido en el primer tiempo, encadenó una sucesión de paradas que espoleó a los suyos y sembró dudas en los morados (el viernes de negro).
Dudas que tuvieron su reflejo en el electrónico al cumplirse el minuto 50 (28-29). Por primera vez en todo el encuentro, el Balonmano Guadalajara tenía que remar contracorriente. Y remó, vaya si remó. El acierto regresó tanto en ataque como en defensa y con él un parcial de 5-1 que parecía dejar encarrilado el choque (33-30, minuto 25).
Sin embargo, la segunda exclusión de Chiuffa resucitó a los leoneses que llegaron a ponerse a un gol y que dispusieron de un último ataque. Una acción que murió en un golpe franco con el reloj a cero. Leo de Almeida buscó el más difícil todavía, pero no lo logró. O quizás sí, porque viendo los precedentes, festejar un triunfo del BM Guadalajara sobre el Ademar, sí que era el más difícil todavía.

BM GUADALAJARA: Almeida (29,5%), Parra (1), Peciña (4), Moyano (8), Chiuffa (10), Antonio (1) y Padilla (6). También jugaron Barbero (50%), Reig (3), Márquez (0), López Rey (0), Bozalongo (0) y Pozzer (1).
ADEMAR: Llamazares (20,8%, Kristensen (2), Da Silva (3), Carrillo (6), Aguirrezabalaga (5) y De Almeida (2). También jugaron Biosca (25%), Mellado (0), Pérez Arce (0), Piñeiro (5), Vega (2), Díez (0) y Dimitrievski (0)
Parciales: 3-2, 8-6, 12-9, 15-13, 18-13, 20-16 (descanso), 23-18, 25-22, 26-25, 28-28, 32-30 y 34-33 (final)
Arbitros: Manuel Casado Fernández y Manuel Vera Ávila. Excluyeron por los locales a Pozzer (2), Bozalongo, Padilla y Chiuffa (2). Por lo visitantes a De Almeida, Piñeiro y Díez.
INCIDENCIAS: Pol. David Santamaría. 1.000 espectadores.