Alrededor de 1.000 personas han participado en 10.001 pasos al corazón de Guadalajara

“Diez mil y un pasos, al corazón de Guadalajara”, una de las novedades de las ferias y fiestas, se ha desarrollado hoy con un éxito absoluto de participación. Alrededor de mil personas se han sumado a esta actividad. 

Se trata de una propuesta del Ayuntamiento de Guadalajara para que los vecinos de la ciudad, de una manera saludable y divertida, conozcan el lugar en el que se ubican los monumentos más representativos a través de un recorrido de 6,2 kilómetros.

La ruta diseñada para “Diez mil y un pasos, al corazón de Guadalajara” ha tenido un recorrido de 6,2 kilómetros .

Este recorrido ha comenzado en el parque de La Concordia a las 10,15 horas, continuando por el paseo de San Roque (donde contemplar la ermita y el panteón de la Condesa de la Vega del Pozo), la calle Santa María Micaela (donde se puede admirar el conjunto del colegio Niña María o Adoratrices), continuando por la zona conocida como El Fuerte de San Francisco (avenidas Ricardo Velázquez Bosco, Juan Pablo II, calles Filadelfia y Portugal donde se ha admirado la iglesia restaurada recientemente que guarda una cripta de la familia Mendoza que recuerda mucho al panteón de El Escorial).

Desde allí, se ha llegado a la plaza de Bejanque (para contemplar el arco, Puerta de Bejanque que fue parte de la muralla de la ciudad), y muy cerca de allí, caminar por Ramón y Cajal, Plaza de Santa María y calle Salazaras para contemplar los restos del antiguo Palacio de los Mendoza, el Torreón del Alamín y al puente de las Infantas para recorrer parte del parque lineal del barranco del Alamín.

El recorrido ha continuado por la pasarela de acceso a la plaza de las Mártires Carmelitas (donde se contemplar el convento de las Hermanas Carmelitas) y ha transcurrido por Ingeniero Mariño y calle Madrid para contemplar el Alcázar Real, la antigua iglesia de los Remedios y el Cuartel Militar de San Carlos.

Accediendo desde la Plaza de los Caídos y avenida del Ejército, los viandantes se han dirigido al Torreón de Alvar Fañez, pasando por los jardines árabes que se descubren a sus espaldas; y de ahí al Palacio del Infantado.

Desde el edificio más emblemático de la ciudad, el recorrido ha continuado por Miguel Fluiters y Teniente Figueroa hasta la iglesia de Santiago y el convento de la Piedad para admirar su fachada renacentista. Después ha discurrido por Benito Hernando hasta el Palacio de los Marqueses de Villamejor o Palacio de la Cotilla, para ir por Travesía de San Miguel y Cuesta de San Miguel hasta la Capilla de Luis de Lucena y a la Concatedral de Santa María.

Desde esta plaza de Santa María, la comitiva se ha trasladado por el Eje Cultural (calle Ramón y Cajal), Plaza de Bejanque y calle Boixareu Rivera hasta el parque de la Concordia, donde se inició el recorrido.