El idioma debe unirnos a Europa

Es sabido que el ser humano siempre ha tenido la lengua como vehículo de comunicación, de socialización, de intercambio de experiencias; en definitiva, de unión. En estos momentos de convulsión, de cambios, se hace necesario, cada vez más, apostar por el conocimiento de otros idiomas que nos sirvan para formarnos humanamente, para conocer la mentalidad de otras sociedades y para el conocimiento de otras culturas; es una forma, mediante la comprensión, de acercar posiciones y trabajar por un bien común, presente y futuro. Convendría recordar a Jean Monnet, uno de los padres de la construcción europea que decía: “Europa debe construirse ladrillo a ladrillo y no por decreto.” El Gobierno regional de Castilla La Mancha desde la presidencia de Mª Dolores de Cospedal tiene claro que hay que hacer una apuesta fuerte por el plurilingüismo. La política educativa de la Consejería de Educación va encaminada a ello.

Son varios los ejemplos que nos ponen sobre la pista: dentro de cinco años todos los centros escolares de nuestra región serán bilingües; el apoyo que se va a dar en Educación Infantil va a ser realizado por especialistas en la lengua inglesa; la Escuela Oficial de Idiomas va adquiriendo cada vez más peso; se ha fomentado el desarrollo de las Aulas Europeas para la formación idiomática del profesorado… Son hechos que constatan el compromiso de Cospedal por el conocimiento de los idiomas. Si queremos ser competitivos y buscamos la absoluta integridad europea es claro el camino a seguir. El Partido Popular y sus dirigentes están poniendo los “mimbres” para conseguirlo.

La educación es una prioridad para el gobierno regional porque es un factor clave en el motor del crecimiento económico y de generación de empleo. Y para ello el bilingüismo es el principal vehículo para mejorar la educación que queremos para nuestros jóvenes. En dos años se ha pasado de tener 195 secciones europeas a 324 y recientemente se aprobó un decreto para agilizar el plan de implantación integral y hacer realidad esa promesa en los 1.167 centros de la región. Esta misma semana se ha firmado un convenio de colaboración entre la Consejería de Educación y la Universidad de Castilla La Mancha para impulsar la formación de profesores bilingües y conseguir que en menos de cinco años 10.000 tengan la titulación B2 que les permita impartir clases en otro idioma, sobre todo, inglés.

Se va a realizar una implantación progresiva mediante un programa de iniciación lingüística, uno de desarrollo lingüístico para afianzar y mejorar los contenidos y, finalmente, un programa de excelencia, con la finalidad de ampliar los conocimientos de forma interdisciplinar. Con todo ello se fijar tres objetivos: mejorar la calidad de la enseñanza, acreditando como mínimo el B2 por parte del profesorado; garantizar la igualdad de oportunidades (no debemos confundir como hace el PSOE intencionadamente, que la igualdad de oportunidades es igualdad de resultados, que es lo que ha hecho con sus leyes, rebajar el nivel académico en su empeño por universalizar la educación); y tener un ambicioso plan de formación del profesorado a través de la Aulas Europeas Los socialistas no han sabido en otros momentos ejercer una labor responsable y darle el valor real al trabajo diario. Han estado casi 30 años con un “cortijo” que tenía goteras por todos los lados; y ahora, en escasamente dos años y medio se han tapado los agujeros y se ha pintado.

En esta vertiente, a nivel nacional, el Gobierno de Mariano Rajoy apuesta por los programas europeos. El programa Erasmus persigue el objetivo de realizar los estudios de educación superior en otro país europeo; en este sentido, pese a las críticas socialistas, a finales de febrero se publicó en el BOE las ayudas concedidas para este programa, donde en nuestra región se contempla una aportación por encima de 370.000 euros para los becarios de la Universidad de Alcalá y más de 147.000 euros para los de la Universidad de Castilla La Mancha. Otros programas europeos son: Comenius, con el objetivo de reforzar la dimensión europea en el campo de la educación infantil, primaria y secundaria, promoviendo la movilidad entre los centros educativos. El Grundtvig, que tiene como meta mejorar la calidad y la dimensión europea de la educación de adultos.

El programa Leonardo da Vinci, orientado a las necesidades de aprendizaje y enseñanza de las personas implicadas en la Formación profesional. El próximo 25 de mayo todos los españoles y castellano-manchegos nos jugamos mucho; por un lado, ser una parte importante en el escenario europeo, como elemento dinamizador de la unión que debe existir para afrontar un futuro globalizado y competitivo; pero por otra parte, seguir trabajando en una educación de calidad, donde nuestros jóvenes tengan las mismas oportunidades para formarse y encontrar un empleo que cualquier ciudadano de la Unión Europea; y para ello es fundamental la enseñanza bilingüe.

Sería lamentable que después del gran esfuerzo realizado por todos y teniendo en cuenta que ahora ya nos encontramos en la buena senda delegáramos nuestro futuro a una opción política como la socialista que no tiene ni un plan ni un candidato idóneo para conseguir los objetivos marcados, máxime con la experiencia vivida anteriormente. Como decía Víctor Hugo: “El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad.” Seamos valientes.