De la España mutante

20/07/2014 - 23:00 Pedro L.Toledo

Ocurría el año de 1912, cuando el libro de poesía Campos de Castilla vio la luz. En el mismo el genial Antonio Machado, ya hablaba de las dos Españas. El problema es que hoy, 102 años, dos dictaduras, una república y cuatro reyes después (si contamos a Juan III como Rey de 1941 a 1975), estamos igual o peor que entonces. El problema es que no sabemos que España se impuso a la otra, si la que muere o la que bosteza o si ambas mutaron en una sola: la Mutante. El problema es que en 1912, el país creía que esto podía cambiar. Sin embargo en 2.014, hemos comprobado que ha cambiado, para volver a donde estaba. Como muestra un botón, aunque sea el de encender o apagar el “smartphone” para recibir la Wifi de Gowex. Empresa cotizada en el Mercado Bursátil Alternativo y que sin embargo, tenía actuaciones propias de la más profunda España de charanga y pandereta. Actuaciones que pasaron desapercibidas por el responsable de la Bolsa de Madrid, para la Comisión Nacional del Mercado de Valores, para el ICAC y hasta para la Agencia Tributaria.
Y actuaciones que llevaron a que la alcaldesa de Madrid, pusiera a dicha empresa como ejemplo de la nueva marca España. El problema surge cuando una empresa de informes para especular, descubre que todo es una tapadera. Que de oficina en Nueva York nada de nada. Que lo del aumento de un 60% en sus ventas en 2013 y de un 70 % en sus beneficios, que viene en su Informe de Auditoria Consolidado para 2.013, es un chiste. Y que la compañía vale menos que la huerta de mi abuelo. Con lo que los que hayan invertido en ella, van a perder hasta el último céntimo. Pero esto siendo algo grave, no es lo peor. Lo peor es el cómo es el que algo así ha pasado desapercibido. Lo peor, que aquí, nadie se ha dado cuenta, de lo que vieron en una visita de dos días, tres veinteañeros norteamericanos. Aunque es posible, que quien esté equivocado realmente sea yo.
Que la cuestión es que estaba a la vista de todo el mundo, pero no se quería ver. En caso contrario, no tiene explicación que a un pobre fontanero, le cueste dios y ayuda el contratar con un simple ayuntamiento, por todos los filtros que ha de pasar. Sin embargo esta empresa, consiguiera contratos con las más importantes ciudades de nuestro país y de allende de nuestras fronteras. Me gustaría saber en que termina esto. Me gustaría saber que será del responsable en cinco años. Aunque mucho me temo, que habrá montado otro “chiringo” para llevárselo crudo de nuevo. O en su defecto, estará tumbado en una playita del Caribe, disfrutando de un “TI” a nuestras costillas. Por algo estamos en la España Mutante. Que la fuerza os acompañe.