De las ferias de Guadalajara por Pepito

Las cosas de los mayores, no hay quien las entienda. A los niños, casi siempre, nos dicen una cosa y ellos hacen otra. Yo soy Pepito, tengo tres años y el otro día empecé en el cole. Mi mamá lleva un montón de tiempo diciéndome que me acueste pronto. Pero ahora que me levanta antes por la mañana, empiezan las ferias y con las charangas no hay quien duerma. Pasan por debajo de mi ventana, cantando cosas con palabrotas y todo. Mi mamá y mi papá se asoman a escucharlas. Pero en lugar de regañarles, como hacen con mi primo, se ríen.

El otro día fuimos al parque con mi hermana pequeña. Ella tiene dos años. Mi mamá me dice que no hay que tirar la basura por el suelo. Pero creo que la gente que va al parque no lo sabe o no tiene mamá, porque había vasos, botellas y basura por todos lados. Incluso había mucha gente con la ropa pintada con “rotu”. Cuando se distrajo mi mamá, mi hermana y yo encontramos unos globos, que había por allí tirados. Como los globos son para jugar, nos pusimos a inflarlos. Pues cuando nos vio, se puso a gritar como una histérica. No hay quien lo entienda y todo porque estaban llenos de crema para el sol. O eso nos dijo ella. Luego cuando dejó de vocear, nos preguntó que si habíamos tragado algo, que esa crema era muy mala para los labios y que igual había que llevarnos al médico.

Pero este verano en la playa, cuando me restregaba la cara con la crema, aunque yo no quería, ella no ponía ningún cuidado. El parque está enfrente de las pistas de atletismo y es que mi papá corre. Luego pasamos a verle y estaba todo hecho una porquería. Por donde corren, se habían rajado. Por donde había hierba, estaba toda amarilla y había sitios, que no tenían ni hierba. Mi papá decía, que este año se han gastado mucho dinero en medio arreglar todo, para traer un campeonato muy importante de correr. Pero luego han preparado allí conciertos de música, para romper lo que habían arreglado y dejarlo peor que estaba.

No hay quien lo entienda, porque, según él, el sitio para dar conciertos, lo van a convertir en un parque, para un señor que se murió. Creo que era el dueño del aeropuerto de Madrid o algo así. Supongo que cuando lleguen las ferias, montarán allí una verbena y lo llenarán de basura, como hacen con todos los parques. Según mi papá, como esto siga así, “al año que vienen, les dará por preparar la fiesta de la espuma, en el nuevo complejo acuático de Aguas Vivas”. Eso yo no me lo pienso perder, porque aunque hay cosas que no entiendo, creo que puede ser muy divertido. Aunque a los mayores no les haga ninguna gracia. Y es que las cosas de los mayores, no hay quien las entienda. Que la fuerza os acompañe. ..