Butrón y Herguedas

05/03/2015 - 23:00 Pedro Villaverde Embid

Pocos comentarios resultan tan gratificantes como los laudatorios a esos personajes que con su dedicación diaria han aportado algo a la sociedad. Uno de ellos recibe este viernes la distinción de Hija Adoptiva de Guadalajara tras décadas de trabajo por lograr la incorporación de la mujer al mundo laboral y la efectiva igualdad de la que tanto se hablará estos días con motivo de la festividad del 8 de marzo. Teresa Butrón es ejemplo de compromiso, de inagotable vitalidad, de eterna juventud. Gracias a ella quedará en nuestra capital la Asociación de Amas de Casa que ella creó y preside desde 1968, el Orfeón Santa Teresa y el Banco de Sangre de Guadalajara- del que fue cofundadora-. También se la recordará por su tesón, por su empeño en una justa causa y los más estudiosos, por esa iniciativa en los años setenta de creación de una guardería laboral que dio empleo a muchas mujeres. En los años cincuenta comenzó su sensibilidad feminista y en pleno año 2015, además de seguir en el colectivo que ella fundó, es miembro de otras asociaciones como la Federación Nacional de Amas de Casa ‘Juana Quilez’, otra gran mujer, y CEACU, Confederación Española de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios. Solo explica esta longevidad en una ilusión, la convicción en el trabajo que se desarrolla, digno de reconocimiento y felicitación. El segundo nombre propio de este fin de semana es José Luis Herguedas. El motivo, la celebración desde este jueves en Pastrana de la Feria más antigua de España e importante del mundo del sector apícola, que él impulsó en los años ochenta y de la que todavía hoy es pieza clave en su organización, como director gerente de la fundación. En una provincia en la que la miel es uno de los productos más distintivos, con denominación de origen, José Luis, junto a otras personas, puso en marcha este encuentro de apicultores, profesionales vinculados al gremio y curiosos de su conocimiento o admiración. Hoy, con carácter internacional, es una referencia ineludible que merece toda clase de parabienes. Herguedas, cortés y buen anfitrión, sigue ahí, año tras año, al pie del cañón. Él aportará a la posteridad esta Feria Apícola. Realiza, además, una gran labor en el mundo del asociacionismo como presidente del Centro Segoviano en Guadalajara habiendo creado un espacio para los emigrados desde aquella tierra a nuestra provincia. Que nuestra consideración a estas dos figuras quede por escrito.