Deseada primavera

23/03/2015 - 23:00 Pedro Villaverde Martínez

Tantas veces hemos escrito en esta columna deseando cosas y tantas veces suceden cosas no deseadas que el pesimismo pudiera apoderarse de cualquiera. Sin embargo sabemos que siempre es el optimista el que se lleva la mejor parte. Una vez más nos visita esta estación tan querida y no podemos dejar pasar la ocasión para desear nuevamente que sea la primavera la que de nuevo haga renacer la esperanza en que el hombre es capaz, como lo demuestra su historia de salir de situaciones malas y hasta de peores. Hoy queremos tener un canto, aunque sea torpe, hacia esta estación que nos llega cargada de esperanza e intentar que sea la suma de todas ellas junto al necesario optimismo lo que nos haga salir de eso que se llama crisis. Con la llegada de la nueva estación seguro que llega ese bienestar que tanto deseamos todos. Los campos se visten con sus mejores luces y colores anunciando que la Naturaleza renace de nuevo. Se dice aquello de la primavera ha venido y nadie sabe cómo ha sido. Tal vez la recuperación económica venga también con esa primavera sin decirnos cómo la recuperación viene con ella. Tal vez estas líneas sean un canto al sol, pero mejor será pecar de optimismo. Los campos, haga frío o calor, se visten con sus mejores galas y parece que inviten a ese optimismo que todos necesitamos. Hoy queremos desear que al igual que los campos se van a vestir de sus mejores galas, nuestra economía o bienestar vuelva a estar con todos nosotros. Hoy con motivo de ese cambio de estación queremos repetir una vez más que es el esfuerzo de todos y en especial de quienes nos dirigen el que puede y debe sacarnos de una situación que todos deseamos sea mejor. La primavera es un pretexto para enunciar una vez más los buenos deseos aunque es cierto también que la primavera es una estación que merece ser recibida con alegría, sobre todo por estos lares en que el buen tiempo suele acompañarla. Ignoramos si es cierto que cuando marzo mayea, mayo marcea. Este año ha habido de todo menos del optimismo que esperamos nos deje una economía más fuerte. Con el difícil optimismo pero necesario esperamos la nueva estación y su bienestar tan necesario siempre.