Consecuencias del veto

10/10/2014 - 23:00 Domingo Martínez Madrid

Aunque el titular “Atrapados en el veto ruso” sería más real que el que utilizo, es que el conflicto en el Este de Europa pone de manifiesto la necesidad de desarrollar una política de mayor diversificación de las ventas agroalimentarias en el exterior. Bruselas no puede abrir más sus mercados, mientras terceros estados cierran los suyos con falsas barreras. La posibilidad de almacenar lácteos en países comunitarios es positivo para que no baje la cotización de la leche.
Esta crisis está poniendo de manifiesto la falta de agilidad de la Unión Europea para que los productores puedan operar con garantías. Al margen de las ventas al exterior, una salida importante sería el aumento de la demanda interna. Se trata de un embargo, de una vía compleja mientras no haya equilibrio en la cadena alimentaria y cuando los productos en origen no experimenten un incremento de sus precios de hasta un 100 % hasta su llegada al consumidor final.