1 de noviembre

30/10/2014 - 23:00 Nuria Roura

La festividad de todos Los Santos está muy arraigada en nuestras costumbres desde hace muchos años; un día festivo que lo dedicamos a nuestros seres queridos que ya nos han dejado con visita a los cementerios, reuniones familiares y amigos con la típica castañada panallets y boniatos. Es una pena que ahora quede desplazada por Hallovveen , fiesta americana que no tiene nada que ver con nuestras costumbres, y un poco burlona, de nuestros sentimientos y tradiciones, calabazas, disfraces, zombis ,esqueletos, brujas... Este año lo último será el traje de enfermera del equipo de protección de los enfermos de Ébola. Me parece que cambiar de nuestra celebración al Hallovveen no tiene ninguna gracia.