Unidad frente al trasvase

27/08/2015 - 23:00 Redacción

 Es sin duda el tema del verano, además de las fiestas que llenan de alboroto y alegría las calles de nuestra provincia. La cabecera del Tajo tiene poca agua y la voluntad de trasvasar hacia el Levante continúa firme. La diferencia en estos últimos meses, desde que cambió el Gobierno regional, es que todos los días está patente el problema, ha surgido una plataforma ciudadana para defender el derecho al desarrollo de los municipios perjudicados y se ha constatado el malestar de una zona del territorio español frente a una medida que se lleva décadas ejecutando sin haber contado con la opinión ni las necesidades e intereses de los afectados. La noticia ha sido recogida por numerosos medios de comunicación nacionales con fotografías o imágenes de unos pantanos sin agua desde los que se sigue trasvasando. El último capítulo lo ha protagonizado el presidente de la Junta de Comunidades, Emiliano García Page, visitando el lugar y pidiendo unidad política, social, económica, empresarial y sindical como ha ocurrido siempre en Aragón donde nadie se plantea la posibilidad de un trasvase desde el Ebro. Por ello ha pedido una manifestación multitudinaria que demuestre que no hay una batalla ideológica ni de partidos, simplemente la defensa de los derechos legítimos de un territorio. Días antes los socialistas pidieron un debate nacional sobre necesidades hídricas y el presidente del grupo parlamentario socialista, Rafael Esteban, reclama “globalidad” al afrontar el tema. Sin embargo hasta la visita de Page ha sido objeto de polémica al decir los concejales del PP que se les ha privado en el acto de poder hablar y exponer sus argumentos como en un principio habían quedado y desde el propio partido, ese mismo día, ya se criticaba la actitud y el histórico comportamiento de los socialistas. Sin entrar en el fondo de las disquisiciones hay que advertirles que ese no es el camino. Si durante tantos años no se ha solucionado nada es porque unos y otros cuando han gobernado han pensado más en sus intereses particulares que en los generales. Es la hora de rectificar y unirse de verdad.