La Fundación Amigos de las Abejas investigará la resistencia natural de estos insectos a la varroa

05/02/2013 - 16:33 M.T.A

La apicultura natural será el objetivo y la particularidad del proyecto que la Fundación Amigos de las Abejas desarrollará durante este año 2013, con el apoyo económico, por tercer año consecutivo, de la Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Recibirán un importe mayor al de años anteriores, 18.460 euros, que les permitirá costear gran parte de los 26.670 euros en los que está valorado el proyecto Acciones de investigación y fomento de la polinización de ecosistemas, mediante la apicultura natural.

El proyecto seguirá las líneas de trabajo de años anteriores. De forma que incorpora también las Colmenas para el comienzo, que facilita a los desempleados la iniciación en la apicultura mediante el préstamo de colmenas de forma gratuita; los Colmenares de Polinización, que se instalan en las zonas de singular interés de la provincia con el fin de facilitar o mejorar los ecosistemas; y la Recuperación de Enjambres, con la que gracias a una red de voluntarios, previo aviso, se encargan de recoger los enjambres detectados en las zonas urbanas y que pueden suponer un riesgo para las personas.

Pero a ellas se añade otra línea de trabajo más, Colmenas Cero Tratamientos, que, según ha precisado el biólogo, Alfonso Martínez, “es uno de los valores más importantes” que les ha transmitido la Fundación Biodiversidad y que ha sido clave para la concesión de esta ayuda, pues solo ha seleccionado un 15 por ciento de los proyectos presentados a la convocatoria. El objetivo es conocer cómo se defienden las abejas, de forma natural, del parásito de la varroa, sin ningún tipo de tratamiento, por lo que tendrán que solicitar una exención de su uso, ya que están obligados por ley a tratarlas. Para ello se construirán ex profeso un total de 20 colmenas, que formarán este nuevo colmenar, y se instalará en una zona de la provincia, alejada de cultivos, con el fin de que no influyan a otras que puedan estar cerca ni que estas se vean afectadas por ellas. Este proyecto cuenta con el apoyo del Centro Apícola de Marchamalo. 

“Estamos convencidos de que un insecto que lleva 100 millones de años en la tierra, resulta incomprensible que se muera”, ha señalado el presidente de la Fundación Amigos de las Abejas, Luis Pérez.