Cientos de personas ‘toman las calles’ de Cabanillas en un apoteósico arranque oficial de las fiestas

25/07/2014 - 08:49 Redacción

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“La fiesta es de todos y para todos. ¡Viva Cabanillas! ¡Que comience la fiesta!”. El encargado de pregonar las fiestas de 2014 –que lo hizo en representación de la peña ‘Los Jiñaos’– jaleaba con este grito a los cientos de peñistas que al filo de la medianoche abarrotaron la plaza del Ayuntamiento para asistir al chupinazo que inaugura el ciclo que mantendrá en pie el ánimo de los cabanilleros hasta el próximo domingo día 27 de julio. Apenas se apreciaban signos de cansancio entre la ‘masa jubilosa’, a pesar de la intensidad de un desfile que durante cerca de hora y media desbordó de alegría y originalidad el municipio de punta a punta; desde el recinto ferial hasta el mismo ‘corazón’ de la localidad.
Todo arrancó hacia las nueve de la noche, con la concentración de peñas y peñistas en el epicentro de la fiesta. A esa hora, en el recinto ferial comenzaban a confundirse y fundirse una edición exclusiva de barbies y ken articulados; alegres emoticonos; indios y vaqueros; animadas fichas de parchís con el tablero ‘a cuestas’; romanos; egipcios; animadoras ‘de pelo en pecho’; payasos diabólicos y otros mucho menos siniestros; nutridas y divertidas patrullas de la Guardia Civil; huidizos Wallies; arlequines; buzos de tierra firme o personajes a los que el Séptimo Arte ha convertido en inmortales. Como los que dieron vida a la película ‘Up’, cinta que recreó la carroza con la que la peña ‘El Desfase’ participó en el desfile. Hubo tres más; una de fantasía tirada por un espectacular caballo alado; la de ‘La Movida’ ambientada en la época romana, y la creada por ‘Los Jiñaos’ para complementar su espectacular disfraz de montaña rusa. 
Un verdadero despliegue de originalidad que fue admirado por las decenas de vecinos que contemplaron el desfile durante todo el recorrido. También fue unánime la fascinación entre las numerosas autoridades que quisieron acompañar al alcalde, Jaime Celada, y a todos los cabanilleros en su día grande; entre ellos la presidenta de la Diputación Provincial de Guadalajara, Ana Guarinos; su vicepresidente, Lorenzo Robisco; la viceconsejera de Presidencia y Administraciones Públicas de la Junta de Comunidades, Mar España; el director general de Deportes, Juan Carlos Martín; el presidente de la Mancomunidad de Aguas del Sorbe, Jaime Carnicero; el diputado regional David Atienza; la alcaldesa de Villanueva de la Torre, Marta Valdenebro; así como otros concejales y representantes políticos de la capital y la zona del Corredor del Henares.
Y así, a ritmo de baile y percusión –espectacular la ambientación a cargo del grupo Zubba Batucada– el desfile coronó la plaza del Ayuntamiento campiñero sin ceder un ápice a la extenuación. Al balcón consistorial subieron entonces varios miembros de ‘Los Jiñaos’ –que este año cumplen su 34 aniversario como peña– para pregonar la fiesta y animar a la participación. De poner voz al discurso se encargó Andrés, que invirtió todas sus energías en hacer un llamamiento a la fiesta sana, en familia, entre amigos y abriendo los brazos al visitante. Fomentando la convivencia –“estas fiestas son para estar con los nuestros, dejando al lado los avances tecnológicos y teniendo más contacto físico”, dijo– y aparcando por unos días las preocupaciones. Asimismo, hubo recuerdo para los que dieron mucho por el pueblo y ya se fueron –“entre ellos el ex alcalde Ramiro Almendros”–, y para los que encontraron la muerte en algunas de las tragedias que han golpeado la provincia en los últimos tiempos –como la masacre del 11-M o el incendio de La Riba–. “Pero también ha habido muchas alegrías; como las que nos han dado nuestros deportistas –ahí está el ascenso a Tercera del Sporting Cabanillas–, o la que supone la llegada de muchos niños, porque ellos son nuestra esperanza y nuestro futuro”, firmó el pregonero.
A continuación, pólvora para prender la mecha de las fiestas y reconocimiento para el ingenio y la originalidad de los cabanilleros en esto del arte del disfraz. Fueron los propios peñistas –desde hace años son ellos los encargados del dictamen– los que decidieron otorgar el premio al mejor disfraz de la noche a las barbies de ‘Non stop’, y el de mejor carroza a la la casita de ‘Up’ recreada por ‘El Desfase’. Como reconocimiento a la creatividad, sendos trofeos y jamones de regalo. Y de este modo concluyó –o para algunos comenzó, según se mire– una noche apoteósica.