Vega del Henares salda el 100% de su deuda con los proveedores

05/03/2015 - 11:17 Redacción


La firma en las últimas semanas de los convenios de pago con ayuntamientos deudores, el último con Cabanillas del Campo, ha acelerado la puesta al día en el pago de las facturas atrasadas.
En el día de ayer, con el pago a la empresa CESPA de las facturas por la prestación del servicio de recogida de residuos correspondientes a los meses de diciembre y enero, la Mancomunidad Vega del Henares se pone al día en sus pagos a proveedores, culminando la intensa labor de regularización económica llevada a cabo en los últimos años. “Es una inmensa satisfacción haber conseguido regularizar las deudas que los ayuntamientos tenían con la mancomunidad y así poder saldar la deuda que nosotros teníamos con los proveedores. Hoy estamos en mejores condiciones de cumplir con los fines para los que fue creada la MVH: prestar un buen servicio a los municipios y a sus vecinos”, afirma Julio García, su presidente. La deuda, que hace dos años alcanzaba cotas insostenibles, más de ocho millones de euros, se debía a las aportaciones pendientes de pago por parte de los ayuntamientos, en una cuantía similar. Unas deudas que se acumulaban desde hacía años y que pusieron en riesgo la prestación del servicio. Hoy ha sido posible su cancelación gracias al esfuerzo de los municipios para ponerse al corriente de pago, bien por aportaciones directas o por las retenciones practicadas por el Ministerio de Hacienda.
“Al final, y aunque fuese por no haberlo hecho antes, el esfuerzo de los ayuntamientos ha sido muy intenso, es justo reconocerlo. Disponer de una mancomunidad saneada es beneficioso para todos, ayuntamientos y vecinos, por eso agradezco, como presidente, el esfuerzo de los municipios para llegar hasta aquí, como agradezco también la labor administrativa llevada a cabo en los últimos meses por el personal de la MVH y de los propios ayuntamientos”. Una vez conseguido el objetivo de poner al corriente de pago a la mancomunidad, el trabajo de sus responsables se centra en consolidar un funcionamiento normalizado en cuanto a la regularidad en el abono de las aportaciones por parte de los ayuntamientos y en el cumplimiento del plazo de pago a los proveedores. “Se trata de conseguir algo tan simple, aunque a veces tan difícil, como realizar los pagos puntualmente, en el plazo de un mes previsto por la ley. Claro que para ello debe darse una premisa fundamental: que los ayuntamientos paguen puntualmente también sus cuotas. Yo creo que va a ser así, pero estaremos vigilantes para que ningún municipio se desmarque, y actuaremos para que no ocurra”. Convenio con Cabanillas del Campo La cancelación de las últimas facturas pendientes viene precedida de la firma del último de los convenios de pago aplazado, según el modelo aprobado en diciembre por el pleno de la MVH, el de Cabanillas del Campo.
Estos convenios tenían por objeto facilitar el pago a los ayuntamientos que aún mantenían cuotas anteriores a 2014 sin pagar a la mancomunidad. Al mismo tiempo propiciaban la regularización definitiva de la deuda en aquellos municipios en que las retenciones de la PIE, llevadas a cabo por el Ministerio de Hacienda, no fueron suficientes para compensar la deuda. El plazo máximo de aplazamiento estaba establecido en diez meses. Cabanillas del Campo era el único municipio que quedaba pendiente y el que mantenía una mayor deuda de pasados ejercicios. Antes de la firma del convenio, esa deuda, correspondiente a los ejercicios de 2012 y 2013, ascendía a 808.000 euros, equivalentes a las liquidaciones mensuales de año y medio. El convenio supone, a voluntad municipal, un pago inicial de aproximadamente las dos terceras partes a la firma del convenio, 536.000 euros, y el aplazamiento durante un mes de los 271.000 euros restantes. “Estos acuerdos benefician a todos y permiten superar definitivamente una situación que perjudicaba gravemente y ponía en peligro a la propia mancomunidad”, asegura Julio García. “Agradezco la buena disposición mantenida en los últimos tiempos por los municipios, pero hay que reconocer que nunca debió llegarse a esa situación límite, y desde luego, hay que dejar claro que nunca debe volver a repetirse. De aquí en adelante no se van a consentir actitudes insolidarias que comprometan o perjudiquen, ni a la mancomunidad, ni al resto de municipios”