El tercer vaso de la planta de Torija empezará a ejecutarse en breve

En medio del cruce de acusaciones entre el Consorcio Provincial de Residuos y el Ayuntamiento de Guadalajara a propósito de los residuos urbanos que llegan a la planta de transferencia de Torija, el diputado responsable del Área de Recursos Sostenibles y de dicho organismo, Jesús Recuero, adelantó ayer que una vez que concluya la tramitación administrativa, en un breve espacio de tiempo, empezará a construir el tercer vaso de la planta.
Hasta que se habilita este nuevo espacio –en unos cinco meses a partir del inicio de las obras–, el segundo vaso se utilizará hasta los 10 metros de altura sobre el suelo en vez de los siete como ocurre ahora, según la autorización temporal concedida por parte del departamento de Calidad Ambiental. “Si no hubiera sido por esta autorización la planta se hubiera cerrado”, precisó Recuero. Éste cubrirá las necesidades de los próximos 10 años, cuando está previsto que finalice la vida útil de la planta.
Según Recuero, la llegada de los residuos sólidos urbanos de la ciudad de Guadalajara tras la clausura del vertedero ha propiciado que la planta se llene antes de los plazos marcados, ya que a ella llegaban también residuos industriales, precisa el diputado. “Nosotros no sabíamos lo que entraba en Guadalajara”. Es a partir de entonces, y concretamente a partir de octubre de 2008, cuando empezó a gestionarse la construcción del tercer vaso en el que ha tenido que negociarse también la financiación que finalmente correrá a cargo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Ecologistas en Acción criticó ayer esta nueva medida adoptada por el Consorcio provincial que responde, según dijeron, “a una lamentable gestión”. A su juicio este aumento de tres metros “ supone un impacto ambiental no evaluado y por lo tanto una posible infracción de la legislación vigente”. Por ello, han pedido información a la Delegación de Medio Ambiente para que explique los términos de esa “presunta autorización especial”. Además, están preparando una queja para la Comisión de Peticiones de la Unión Europea para que investigue “las irregularidades existentes” en la planta.
Recuero se refirió también ayer a la planta de tratamiento de residuos que se va a construir en la capital, en el Serranillo, que prevé pueda empezar a construirse en un mes y medio o dos meses “si no hay recursos”. Tras declarar desierto el concurso de licitación, ya que no se ajustaba a la Ley de Contratación –apuntó el diputado– en los próximos días se realizará una negociación por procedimiento urgente y sin publicidad con las cuatro empresas que presentaron sus ofertas para llegar a un acuerdo y poder llevar a efecto la construcción de esta planta.